El índice de gestores de compra (PMI, por sus siglas en inglés) -principal indicador de la situación económica de una región a partir del comportamiento de sus empresas- se situó en 54,9 puntos, por debajo de los 55,8 registrados en abril, según un informe de la consultora internacional S&P Global.
No obstante, el número se mantiene por encima de los 50 puntos que separan el crecimiento de la contracción en términos de interpretación económica.
De este modo, mayo fue el decimoquinto mes consecutivo de crecimiento económico, impulsado por el dinamismo del sector de los servicios, el turismo y el ocio, que se recuperan cada vez más de las restricciones impuestas durante 2020 para controlar la Covid-19.
Por otra parte, la producción manufacturera se recuperó ligeramente tras casi paralizarse en abril. Pero la limitación derivada de la escasez de suministros y sus efectos sobre los plazos de entrega de los proveedores la mantuvieron con datos modestos.
La creación de empleo aumentó en ambos sectores, sobre todo en los servicios, que reportaron el mayor aumento desde 2007.
Por el contrario, los precios experimentaron el segundo mayor incremento de la serie histórica en la zona del euro, debido al impacto de la crisis energética que se agudiza por momentos.
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