El ejercicio denominado Elephant Walk (caminata de elefante) incluyó la verificación de docenas de aviones de combate armados totalmente y procedimientos estándar antes del despegue de esas aeronaves, indicaron fuentes locales.
Previo al entrenamiento, el Estado Mayor Conjunto de Seúl dijo que presuntamente Pyongyang completó los preparativos para una nueva prueba nuclear y de misiles, y destacó su firme disposición a enfrentar una hipotética amenaza desde la nación limítrofe.
También se conoció que el Gobierno de Corea del Sur revisará la continuidad de las medidas económicas impuestas contra la RPDC el 24 de mayo de 2010, que, entre otros aspectos, impiden la mayoría de intercambios entre los dos países.
Un funcionario surcoreano citado por la agencia Yonhap informó que independientemente del análisis sobre el levantamiento o no de las medidas no existe la posibilidad de un paso favorable a su eliminación en las circunstancias actuales.
No obstante, un grupo de empresarios surcoreanos, que anteriormente estaban involucrados en proyectos económicos en la RPDC, instó a Seúl a suprimir las acciones punitivas.
En conferencia de prensa, los hombres de negocios afirmaron que desde la entrada en vigor de esas sanciones más de mil empresarios de Surcorea viven de manera miserable, algunos en la quiebra y otros presentan un alto cúmulo de deudas.
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