Según dijo en el Consejo de Seguridad, se reportan enfrentamientos armados, expansión de asentamientos israelíes, desalojos, demoliciones y tomas de estructuras palestinas por parte de Tel Aviv.
También se refirió a un ataque mortal ocurrido en Israel, lo cual se suma a la espiral de violencia en la zona.
En tanto, en la franja de Gaza, señaló Wennesland, los esfuerzos de las Naciones Unidas y su socios internacionales para mejorar la vida de los palestinos y las medidas de Israel para aliviar la presión han permitido que continúe el frágil alto el fuego.
Sin embargo, mantener la calma no es suficiente ni sostenible: se necesita hacer más para aliviar la crisis humanitaria y levantar los cierres israelíes, subrayó.
Con respecto a los desalojos planificados en la localidad de Masafer Yatta, expresó gran preocupación por las posibles implicaciones del fallo del Tribunal Superior de Israel y el costo humanitario para las comunidades palestinas si se ejecutan esas acciones.
Al respecto, pidió a las autoridades israelíes poner fin al desplazamiento y desalojo de palestinos, de conformidad con las obligaciones de la potencia ocupante en virtud del derecho internacional humanitario.
Del mismo modo, abogó porque se aprueben planes que permitan a los palestinos construir legalmente y abordar sus necesidades de desarrollo.
La creación y reconocimiento del Estado de Palestina es hasta la fecha uno de los asuntos pendientes de más larga data en Naciones Unidas, si bien desde hace 70 años existe el Estado de Israel.
car/ifb