Según ese medio de difusión, el Oficial de Relación Pública de la Policía estadual, Geoffrey Ogbonna, confirmó la liberación de los creyentes, quienes fueron raptados por hombres armados sin identificar cuando viajaban en un automóvil a través de un vial que une las ciudades de Enugu y Port Harcourt.
La fuente no precisó si los plagiados se libraron del encierro a cambio del pago de rescate financiero a los presuntos delincuentes.
El más reciente acto de plagio ocurre seis días después de que pistoleros desconocidos raptaron a cuatro personas, entre ellos dos religiosos, en el norteño estado de Katsina, según un informe gubernamental.
Antecedió a ese violento hecho el secuestro dos semanas antes de otro sacerdote católico en el sureño estado de Akwa Ibom.
Frente a la inseguridad reinante en Nigeria, sobre todo en zonas norteñas, y el creciente malestar social, recientemente el presidente del país, Muhamamdu Buhari, ordenó el reforzamiento de la vigilancia en esos territorios por las fuerzas gubernamentales.
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