La pandemia nos tomó por sorpresa y las circunstancias inusuales del cierre exigieron una adaptabilidad extraordinaria, en particular de nuestros cerebros, describieron los autores del Paris Brain Institute, ubicado en el Hospital Universitario Pitié-Salpêtrière, el primer centro de neurología de Francia.
“Nuestra primera observación es que el confinamiento fue psicológicamente angustioso para la mayoría de los participantes, lo que otras investigaciones demostraron, pero que en promedio se sintieron más creativos”, afirmó Théophile Bieth, coautor del artículo.
Hay alguna evidencia en la literatura científica de que necesitas sentirte bien para ser creativo, mientras que otra apunta en una dirección diferente, argumentaron los participantes.
No se sabe qué sentido toma este proceso: ¿nos sentimos bien porque somos creativos o ser creativos nos hace más felices?, concluyó Alizée Lopez-Persem, coautora del trabajo.
“Aquí, uno de nuestros análisis sugiere que la expresión creativa permitió a las personas gestionar mejor sus emociones negativas relacionadas con el confinamiento y, por lo tanto, sentirse mejor durante este período difícil”, remarcó la experta.
La creatividad -según los resultados- resulta una de las funciones cognitivas que permite a los humanos ser flexibles en nuevos entornos y resolver problemas en escenarios únicos y las circunstancias excepcionales que rodearon la Covid-19 obligaron a replantear rutinas, poner nuevos límites, en definitiva, ser creativos.
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