La medida exige a las instituciones y trabajadores de ese sector verificar bien las edades de los clientes jóvenes, veda la promoción de la práctica en las escuelas y estipula fuertes sanciones para los infractores.
También convoca a las familias, al país y a la sociedad completa a apoyar la educación de las nuevas generaciones, disuadirlas de tatuarse e informarles sobre los riesgos para su salud.
Según las autoridades, la disposición tiene como objetivo proteger los derechos legales de los menores de edad, pues buscan evitar que sean obligados, persuadidos e inducidos a hacerse tatuajes.
Como antecedente a finales de 2021 China prohibió que los futbolistas incurran en esa práctica, llamó a quienes tengan dibujos en la piel a borrárselos y convocó a los deportistas a convertirse en “ejemplos positivos para la sociedad”.
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