Corbyn salió en defensa de los empleados del sector que amenazan con ir a la huelga la semana próxima, luego de que el ministro del Transporte, Grant Shapps, dijo este miércoles en el Parlamento que el paro sería contraproducente e inútil.
El veterano político de izquierda también exhortó a las autoridades a reunirse con los representantes sindicales para escuchar sus demandas y garantizar juntos un sistema ferroviario eficiente y seguro.
El Sindicato de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte (RMT) anunció que al menos 40 mil de sus afiliados se ausentarán de sus puestos de trabajo los días 21, 22 y 23 de junio, a menos que la patronal acceda a su demanda de equiparar los salarios al costo de la vida, y garantice la seguridad laboral y el fin de los despidos forzosos.
Shapps, quien el domingo pasado dijo que podría recurrir al uso de trabajadores temporales para reemplazar a los huelguistas, afirmó, por su parte, que la industria ferroviaria necesita ayuda para adaptarse a los tiempos modernos.
El ministro también consideró difícil un eventual diálogo con el RMT, debido a la renuencia del líder del gremio, Mick Lynch, a negociar con un gobierno conservador.
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