La decisión se produjo anoche al término de una reunión del presidente de la RDC, Félix Tshisekedi, con el Alto Consejo de Defensa, anunció el portavoz del gobierno Patrick Muyaya.
Entre los pactos afectados se cuentan uno comercial firmado en junio de 2021 entre los mandatarios Tshisekedi y su vecino ruandés, Paul Kagame, sobre la explotación del oro para garantizar su trazabilidad en la República Democrática del Congo.
Mediante esa acción ambos países evitarían que grupos armados extremistas se apropiaran de ese recurso, que procesaría un emprendimiento conjunto entre las empresas congoleña Sociedad Aurífera de Kivu y de Maniema y la ruandesa Dither Ltd.
Los dos países vecinos tenían también un acuerdo sobre la prevención de la evasión fiscal y la doble tributación y otro sobre la promoción y protección de las inversiones.
Esta suspensión se suma a la vigente que impide a la compañía aérea nacional ruandesa RwandAir aterrizar aquí.
La tensión bilateral escaló luego que el 28 de mayo pasado, las autoridades arrestaron a dos soldados ruandeses en la parte congoleña en circunstancias no esclarecidas del todo.
Gracias a las negociaciones diplomáticas los dos soldados regresaron Ruanda, pero el cruce de acusaciones se mantuvo latente.
De un lado, la RDC acusa a Kigali de apoyar al M23 y del otro, Ruanda culpa a Kinshasa de brindarle soporte a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda. Ambas organizaciones son consideradas terroristas por las contrapartes.
El incidente llevó a la mediación del presidente angoleño, Joao Lourenzo, quien anunció el pasado 31 de mayo que Tshisekedi y Kagame, aceptaron reunirse en Luanda en una fecha que aún no fue dispuesta.
Desde el genocidio de 1994 de los hutus contra los tutsis en Ruanda las relaciones fueron tensas entre los dos países, pero en 2019 esa situación cambió con la llegada al poder de Tshisekedi, quien ahora enfrenta la primera crisis bilateral con su vecino.
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