García Luna está preso en Estados Unidos por relaciones con el cartel de Sinaloa, enriquecimiento ilícito y otros delitos graves.
El tema salió a la luz por nuevas revelaciones en Nueva York según las cuales García Luna amenazó de muerte o sobornó a periodistas para que no atacaran al cartel de Sinaloa para el cual trabajaba.
López Obrador pidió que todo se ventile, que la vida pública sea cada vez más pública porque se trata de la seguridad de los ciudadanos y de la seguridad nacional.
Medios en Estados Unidos dijeron que hay audios en manos de la fiscalía con las amenazas del reo a periodistas y testigos en México, lo cual calificó el mandatario de “un asunto muy delicado” y pidió “desde ahora, ojalá y se busque la forma de que se den a conocer las grabaciones”.
El presidente recordó que el 11 de diciembre de 2006 el exmandatario del Partido Acción Nacional Felipe Calderón declaró la guerra contra el narco en Michoacán, a donde asistió con uniforme militar, y al poco tiempo de eso empezó a aparecer García Luna.
Ayer fiscales estadounidenses presentaron una solicitud para la inclusión de evidencia sobre los intentos de Genaro García Luna para “silenciar” a periodistas mediante amenazas, hostigamiento y sobornos cuando era secretario de Seguridad Pública, como parte de sus actividades corruptas con el cártel de Sinaloa.
Hace uno días volvió a incidir en lo mismo con nuevos y renovados intentos desde la prisión, de manipulación de testigos en su contra, y los magistrados dijeron que hay evidencias al respecto.
En un memorando presentado al tribunal federal en Brooklyn este miércoles, y que circula ampliamente en México, los fiscales argumentan a favor de incluir evidencia de delitos y actos que no están detallados dentro de la acusación formal pero que forman parte de las actividades criminales del acusado.
Detallan que desean presentar evidencia sobre cómo entre 2008 y 2013 –mientras García Luna ocupaba un puesto en el gabinete de seguridad pública–, el acusado sometió a un o una periodista (no se especifica género) a “una campaña de hostigamiento y amenazas” durante años ante los intentos de ese/a informadora para investigarlo.
Además, solicitan permiso para incluir evidencia de que entre 2009 y 2010, el acusado usó dinero proveniente de actividades corruptas para pagar “sobornos a una organización de noticias para evitar que periodistas de esa organización publicaran notas negativas sobre él”.
López Obrador abogó por la transparencia en este caso y los estrechos vínculos del protector del cartel de Sinaloa con el gobierno de Felipe Calderón, responsable de la guerra contra el narcotráfico que generó la ola de asesinatos actual.
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