El sondeo de la agencia de noticias STT indagó sobre las posibles formas de acoso y violencia a las que están sujetas las personas en la organización de eventos de defensa de los derechos sexuales y de género en el país.
Dicho resultado arrojó que 22 de los 25 encuestados reportaron tales experiencias, con resultados referidos al discurso inapropiado y ofensivo, así como vandalismo y robo de banderas del Orgullo.
La investigadora sobre el discurso de odio de la Universidad de Jyvaskyla, Tuija Saresma, explicó a la Yle que los altos números indicados por la encuesta podrían ser indicativos de actividad anti-queer organizada.
En ciertas áreas, el vandalismo de los símbolos del arcoíris y el robo de las banderas del Orgullo es un acto recurrente, de acuerdo con Anni Rannikko, coordinadora de la rama de Karelia del Norte de Seta, el principal grupo de derechos LGBTI de Finlandia.
Solo el año pasado, se robaron banderas en Lahti, Joensuu, Oulu y Riihimäki, según las declaraciones de la experta a la Yle.
Este mes las autoridades finlandesas informaron de un acusado en un acto similar que sostuvo estar motivado por el «aburrimiento debido a la presencia excesiva de minorías sexuales».
Saresma añadió al respecto que tanto el robo como la destrucción de banderas es un acto grave, sobre todo si se tiene en cuenta el motivo del odio.
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