Kvitova, cabeza de serie número 14, quebró los pronósticos al batir a la octava favorita en una hora y 18 minutos de juego.
De 32 años y ubicado en el puesto 31 de la clasificación profesional, la checa consiguió una fácil victoria ante Ostapenko, 14 del escalafón mundial, quien sumaba su segunda final consecutiva en el certamen y que llegaba sin haber cedido set alguno en la presente edición.
La ganadora, titular de Wimbledon en 2011 y 2014, regresó a la disputa de la corona de la lid británica después de 11 años y alcanzó su tercer éxito ante la letona frente a dos reveses.
Además, ganó su cetro 29 en el circuito profesional gracias a la fortaleza de su saque con el que obtuvo siete puntos por directo frente a los cinco de Ostapenko y logró tres quiebres en 11 oportunidades frente a una adversaria incapaz de sumar al menos uno en tres ocasiones.
La checa tuvo una efectividad del 98 por ciento con el primer servicio frente al 89 de la derrotada y conquistó el 80 por ciento de las unidades apoyada en el saque inicial, mejor al 71 de su rival.
En la rama masculina, el estadounidense Taylor Fritz, tercer preclasificado, tres años después de conseguir su primer título, volvió a ganar sobre la hierba de Eastbourne, al imponerse en la final a su compatriota Maxime Cressy por 6-2, 6-7 (4/7) y 7-6 (7/4), en dos horas y 15 minutos de juego.
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