De acuerdo con las autoridades, a partir de ahora los pacientes no utilizarán los hospitales de la red pública durante su convalecencia, sino que irán a residencias especializadas.
Esta nueva medida, que entrará en vigor desde mañana, pretende hacer más viable la detección y atención de la enfermedad, una vez que varios estudios demostraron que «la hospitalización obligatoria de los contagiados con la enfermedad es contraproducente para detectar nuevos casos».
De esa manera, Chile alineará sus protocolos a los usados en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, España, Alemania, Francia y Bélgica para controlar y mantener el aislamiento de los contagiados con la viruela símica.
Esa enfermedad se detectó por primera vez en la República Democrática del Congo en 1970, pero a comienzos de mayo de 2022 apareció un nuevo brote en España, Portugal, Estados Unidos y Canadá. Según reportes de la Organización Mundial de la Salud, hasta el momento se detectaron tres mil 413 casos en 50 países, la mayoría (86 por ciento) en Europa.
Específicamente en Chile, las autoridades sanitarias confirmaron seis positivos hasta la fecha.
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