La República de Cuba es objeto constante de injerencias injustificadas de Estados Unidos en sus asuntos internos, incluso con el uso de las tecnologías de la información, con el objetivo de organizar protestas y manifestaciones contra el gobierno actual, destaca la asociación.
Condenamos categóricamente todas las formas de intervención en los asuntos internos del estado soberano de Cuba y todas las acciones e intentos criminales estadounidenses de ejercer presión política e ideológica sobre este pueblo amante de la libertad, subraya.
De acuerdo con un comunicado conocido aquí, los intentos de socavar la soberanía de varios países independientes son una táctica habitual de Estados Unidos.
Sin embargo, en las condiciones cuando el mundo lucha contra las consecuencias de una pandemia de dos años y un empeoramiento de la crisis económica mundial, estos intentos adquieren un carácter criminal, considera la agrupación de solidaridad con la isla.
Tales intentos no sólo violan cínicamente el derecho internacional y los principios básicos de las relaciones internacionales, sino también van más allá de la moralidad universal, afirma el documento.
La provocación constante de la «intervención humanitaria» no puede promover contactos ni mejorar la vida de los cubanos, subraya el texto.
Tal posición de Washington solo provoca irritación y contribuye a la difusión de información falsa sobre Cuba y su sociedad civil, para socavar así la imagen del estado cubano estable y seguro ante los ojos de la comunidad mundial, denuncia el comunicado.
Bajo distintos pretextos, Estados Unidos impone en países su propia imagen del mundo y reglas de vida que son convenientes y beneficiosos solo para ellos, considera la asociación de solidaridad.
La élite política estadounidense a lo largo de años se acostumbró a ignorar la opinión de otros actores internacionales, que son capaces de implementar una política independiente, como es la República de Cuba, destaca el comunicado.
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