Presentado en el Ministerio Público Federal de Brasilia, el documento tiene la firma de las diputadas del PSOL Áurea Carolina, Talíria Petrone y Vivi Reis.
«El racismo estructura las relaciones sociales de Brasil. En ese sentido, tratar a seres humanos negros de forma evidentemente peyorativa, como hace el señor Nelson Piquet, no se ajusta con las prácticas para la efectividad del dispositivo de igualdad», señalan las parlamentarias, citadas por la periodista Mônica Bérgamo, del diario Folha de Sao Paulo.
De acuerdo con la comunicadora, las legisladoras destacaron que Piquet es adepto del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro.
«Nelson Piquet es una prueba más de que la retórica virulenta empleada por el presidente Jair Bolsonaro habita en sus partidarios a sentirse liberados para utilizar los mismos términos y prejuicios de clase, raza y género», señalaron.
Tal acusación se basa en declaraciones que Piquet, campeón de F1 en 1981, 1983 y 1987, hizo en una entrevista amplificada por internet, en la cual alude a Hamilton como «ese negrito», cuando realizó unas maniobras en el Gran Premio de Silverstone (Gran Bretaña) el año pasado.
Los peligrosos giros del siete veces campeón de F1 en esa pista casi causaron un choque con el holandés Max Verstappen, quien tiene como novia a la hija del expiloto brasileño.
El término de neguinho en portugués, que significa pequeño negro, no es un insulto racista en Brasil, pero es un enunciado que se ve cada vez más como de mal gusto.
«Lo que dije fue desafortunado, y no defiendo eso, pero voy a dejar claro que el término es uno de esos que desde hace mucho e históricamente se usan de forma coloquial en el portugués brasileño como sinónimo de tipo o persona», dijo el excorredor brasileño.
Piquet fue suspendido el jueves de su condición de miembro honorario del British Racing Drivers’ Club, propietario y administrador del circuito de Silverstone.
Hamilton demandó un cambio de «mentalidades arcaicas” tras el exdirector de la F1 Bernie Ecclestone defendiera a Piquet en la televisión británica.
Cuestionó por qué se da tanta importancia a las «voces más antiguas» en la categoría reina del automovilismo.
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