Shvartsman, nacido hace más de un siglo en la ciudad de Minsk, actual Belarús, es el creador de los personajes más icónicos de la animación soviética y cuenta en su haber con 57 filmes como director de arte y 13 como realizador, destacó la agencia de noticias Sputnik.
Además de Cheburashka, calificado por algunos como el «Mickey Mouse soviético», Shvartsman dibujó o esculpió los protagonistas de animaciones tan conocidas como «El antílope de oro» (1954), «La reina de las nieves» (1957), «El robo de los colores» (1957) y «38 loros» (1976-1985), entre muchos otros.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, lo calificó de «patriarca de la escuela de animación nacional, hombre con un don claro, generoso y extraordinario».
Shvartsman fue valorado en América y Europa, y en Japón lo reconocían como un clásico y su Cheburasha como un personaje de culto.
El reconocido dibujante nipón Hayao Miyazaki confesó cierta vez que comenzó a ilustrar después de ver «La reina de las nieves» de Shvartsman.
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