Medios de prensa como el canal BFMTV y el diario Le Figaro comenzaron desde temprano este lunes a divulgar nombres de nuevos titulares y de funcionarios que dejan el cargo en un Ejecutivo encabezado por la primera ministra Elisabeth Borne, a quien Macron le ratificó su confianza, mientras desde la oposición reclaman su renuncia.
Según las primeras informaciones, el exministro de Salud Olivier Véran asumirá como portavoz gubernamental en reemplazo de Olivia Grégoire, quien irá al Ministerio de Economía, cuya jefatura seguirá en poder de Bruno Le Maire, uno de los hombres clave para el jefe de Estado.
Asediado e impopular por las acusaciones de violación, el ministro de Solidaridad Damien Abad abandonará la cartera sin apenas ejercerla y Marlène Schiappa regresará al gobierno encargada de la Economía Social.
Desde la oposición advierten que los cambios no servirán de nada, en un contexto complejo para el oficialismo tras no conseguir en las legislativas del 12 y del 19 de junio la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, lo que pone en riesgo los programas y las promesas de Macron.
De acuerdo con medios franceses, el presidente pudiera liderar hoy un Consejo de Ministros con el nuevo equipo, con las expectativas centradas en el discurso de política que realizará el miércoles la primera ministra ante el Hemiciclo.
Lo habitual es que el primer ministro se someta al voto de confianza de los diputados después de presentar las prioridades del gobierno, pero ese pasa está en duda, al no ser una obligación constitucional y al no contar el oficialismo con el control absoluto de la Asamblea.
Figuras de la oposición, en particular el líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, exigieron el voto de confianza, o de lo contrario Borne pudiera enfrentar una moción de censura.
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