El alcalde de Lappeenranta, Kimmo Jarva, ciudad del sur de Finlandia próxima a la frontera con Rusia, expresó a finales de junio la esperanza de que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) establezca una base allí tras el ingreso del país en el bloque militar.
Jarva precisó al canal de televisión Yle que el aeropuerto de Lappeenranta estaría disponible si las fuerzas aliadas lo necesitaran.
La pertenencia a la Alianza Atlántica, según el alcalde, «brinda una sensación de seguridad y puede ayudar a realizar inversiones en el área».
«Está equivocado. Las infraestructuras militares del enemigo son las primeras en ser atacadas tras el comienzo de hostilidades», comentó Volodin en la red social Telegram. El parlamentario advirtió que «el despliegue de las bases de la OTAN no protegerá ni a Helsinki ni a Estocolmo. Todo lo contrario, expondrá al golpe a los vecinos de aquellas ciudades que acojan infraestructuras militares».
Fundada en 1949 por 12 países, la OTAN fue creciendo hasta convertirse en el mayor bloque militar a nivel global, con 30 miembros en la actualidad.
A finales de junio, los aliados tomaron la decisión de invitar también a Suecia y Finlandia, que revisaron su tradicional política de neutralidad en medio del conflicto bélico en Ucrania.
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