El embajador del país caribeño aquí, Carlos Miguel Pereira, subrayó que para emprender la ofensiva las fuerzas hostiles se valen una vez más de las serias dificultades comerciales y financieras generadas por el bloqueo de Washington y la crisis internacional.
Según remarcó, con tal propósito acuden a viejas prácticas de ataque, las combinan con modernas técnicas de Guerra no Convencional, destinan millones de dólares y usan tecnologías sofisticadas.
“Una vez más se apuesta a la mentira y se trata de generar internacionalmente la imagen de un país socialmente inestable y en crisis política, utilizando falsedades y fabricadas leyendas. Nos ponen etiquetas de todo tipo y se promueve el odio”, indicó, al alertar que buscan repetir disturbios como los del 11 de julio de 2021.
Pereira también se refirió a la resistencia de los cubanos, el apoyo de América Latina y El Caribe frente a las maniobras de Estados Unidos, y los logros de la isla en el desarrollo y aplicación en tiempo récord de vacunas propias contra la Covid-19.
“Cuba no esconde sus carencias. Atravesamos tiempos difíciles. Pero estamos seguros que con el humanismo, la creatividad y el esfuerzo tremendo de nuestro pueblo y la ayuda solidaria de naciones hermanas como China, saldremos victoriosos. Cuba es y será un país estable, seguro, unido”, afirmó.
El diplomático pronunció estas palabras durante el comienzo de una velada en la sede de la Fundación China para la Paz Mundial en Beijing, que reunió a diplomáticos de otros países, amigos chinos y compatriotas residentes aquí en apoyo a la mayor de las Antillas.
Agradeció a todos por contribuir al desarrollo de las relaciones de amistad entre los dos estados socialistas, al precisar que el apoyo mutuo en el escenario multilateral y el compromiso con la paz y la seguridad reflejan el carácter especial de los vínculos y la aspiración común de construir un mundo más justo y sostenible.
De su lado, Li Ruohong, presidente de la Fundación china para la Paz Mundial, resaltó los aportes de Cuba al Índice de Desarrollo Humano a través de la alta esperanza de vida, la alfabetización masiva y el avance en la medicina.
Aseveró que la llegada de los primeros chinos a la isla en junio de 1847 dejó como herencia una amistad especial y sólida frente a las turbulencias internacionales.
Finalmente, Li llamó a trabajar juntos “para expandir el influyente círculo de amigos entre ambos países, beneficiar a la causa de paz y a los pueblos del mundo”.
La actividad incluyó un momento cultural donde artistas del gigante asiático interpretaron canciones icónicas del pentagrama musical de Cuba y presentaron coreografías de salsa acompañados de temas de orquestas emblemáticas de ese territorio.
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