Al término de una reunión en Santiago, ciudad capital de la mencionada demarcación, los educadores abandonaron una mesa técnica con el Ejecutivo y consideraron que no aporta respuestas en torno al alto precio del combustible y el mejoramiento de las condiciones del sector, dos de sus reclamos.
Voceros del grupo afirmaron que el presidente de la República, Laurentino Cortizo -ahora en Estados Unidos por exámenes a su salud-, envió a esas pláticas una comisión sin propuestas.
Como reacción, miembros de la Asociación de Educadores Veragüenses se levantaron de las negociaciones, mientras sus colegas protestaban en diferentes puntos del país, como en la ciudad de David (Chiriquí) y puntos en la vía Interamericana en la provincia de Coclé.
Mientras, fuentes allegadas a la comitiva gubernamental aseveraron que están dispuestos a seguir con esas pláticas, posiblemente mañana viernes.
En Santiago de Veraguas la mesa de trabajo de alto nivel la encabezó la ministra de Educación, Maruja Gorday; y contó con la mediación de la Defensoría del Pueblo.
Antes de iniciar el intercambio, Gorday señaló las expectativas que se tiene en cuanto a que cada parte presentara sus solicitudes, encontrar un punto medio y continuar, pero eso no fue posible.
La ministra indicó que la recuperación de aprendizaje mantiene niveles alarmantes en cuanto a asignaturas básicas; y abogó por la mediación para mantener el diálogo, pero con las escuelas abiertas.
Sin embargo en la medida que pasan las horas, crecen las manifestaciones de educadores en Puerto Armuelles (provincia de Chiriquí) también en los territorios de Bocas del Toro, Herrera, Panamá Oeste, Colón y Darién.
Por su parte, en Ciudad de Panamá, decenas de pedagogos marcharon hasta la Asamblea Nacional (parlamento), para exigir además que el Estado invierta mínimo un seis por ciento del Producto Interno Bruto en mejoras de este sector. Los manifestantes, entre ellos los estudiantes, y padres de familia, coreaban “Ahí están, ellos son, los que venden la Nación”, en alusión a los diputados y a ese órgano del Estado ajeno a sus peticiones.
Un dirigente magisterial, Diógenes Sánchez, dijo a la prensa que se mantendrán en las calles en pie de protesta, hasta que este Gobierno ofrezca respuestas y medidas concretas sobre sus exigencias; además de que cumpla con sus promesas de campaña.
También estudiantes y administrativos de la Universidad de Panamá se sumaron a las protestas de los gremios magisteriales y otros sectores exigiendo el congelamiento del precio del combustible.
Uno de los voceros de los estudiantes, Donier Salazar, manifestó que el actual gobierno no da respuestas certeras a las grandes problemáticas que hay en el país, que no se ha atrevido a tomar medidas que resuelvan las necesidades de la población.
Indicó que el Movimiento Estudiantil del alto centro de estudios estableció que las medidas de presión seguirán de forma permanente en lucha contra el Ejecutivo del hambre, la corrupción y la impunidad, al tiempo que se mantenía un bloqueo de la vía Transístmica frente al campus universitario.
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