Según comunicó la empresa, la obra comenzará en 2022 y concluirá en tres años, como parte del compromiso de la empresa de avanzar hacia una minería sustentable y reducir en un 60 por ciento el consumo unitario de aguas continentales.
En opinión del presidente de Codelco, Máximo Pacheco, este paso “es una contribución fundamental” ante la urgencia del país de que la gran minería del cobre deje de utilizar agua continental para sus procesos.
La planta, cuya construcción estará a cargo de Marubeni Corporation y Transelec, se levantará en Tocopilla a un costo estimado en mil millones de dólares y funcionará para las operaciones de la gigantesca mina Chuquicamata, ubicada en el Desierto de Atacama.
Desde hace una década Chile sufre una sequía que afecta a tres cuartas partes de su población, especialmente en el centro y norte del territorio nacional.
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