Según datos recopilados por la agencia de estadísticas CryptoCompare, los volúmenes al contado y de derivados cayeron en todas las bolsas respecto a mayo y confirmaron un primer semestre muy poco esperanzador para el criptomercado.
Por acápites, los volúmenes al contado disminuyeron casi un 28 por ciento hasta tocar los 1,41 billones de dólares cuando el bitcóin se desplomó, el nivel más bajo desde diciembre de 2020.
Mientras, los volúmenes de negociación de derivados descendieron un 7 por ciento durante el sexto mes del año y alcanzaron su valor más bajo desde julio de 2021.
Según expertos, la tendencia hacia abajo está relacionada con los descensos del bitcóin y el ether, que cayeron más del 70 por ciento desde los máximos históricos del año pasado.
Sin ir más lejos, el bitcóin se hundió un 15 por ciento el 18 de junio a 17 mil 599 dólares, su precio más bajo desde fines de 2020, en lo que supone la máxima expresión de la inestabilidad de los criptomercados.
En sentido general, las criptomonedas presentan un panorama poco alentador marcado por tasas más altas con las que los bancos centrales intentan controlar la elevada inflación.
La tendencia marca un cambio con respecto a los últimos dos años de pandemia, cuando los inversionistas minoristas se abalanzaron a las criptomonedas y otras apuestas arriesgadas.
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