«Declaraciones como éstas, que contienen reivindicaciones sobre el territorio ruso, demuestran una vez más que la operación militar especial es correcta y está absolutamente justificada, ya que solo por estos medios se puede librar a Ucrania de tales representantes de la dirección», declaró el vocero a la agencia TASS.
Peskov añadió que entre las amenazas de la cartera castrense ucraniana también está la de destruir la flota del Mar Negro de la nación euroasiática.
Ante estas nuevas intensiones el líder del Partido Liberal-Demócrata de Rusia y miembro de la delegación rusa en las conversaciones con Ucrania, Leonid Slutski, confirmó este martes que Moscú exigirá condiciones más estrictas, en cuanto al contenido como a los plazos, si se reanudan las negociaciones ruso-ucranianas.
«Las condiciones por nuestra parte serán más duras tanto en lo que respecta a la desmilitarización como a la desnazificación, más duras en su contenido y en el plazo de aplicación. Insisto en que esto será así si se reanuda el proceso de negociación», declaró el dirigente político.
Asimismo, el también diputado de la Duma Estatal (Cámara Baja del Parlamento de Rusia) añadió que hasta la fecha las autoridades de Kiev oficialmente no muestran ninguna voluntad de reanudar los diálogos.
Anteriormente, el asesor del presidente ruso para Asuntos Internacionales, Yuri Ushakov, afirmó que Moscú no veía ningún interés por parte de Kiev y Occidente en reanudar las negociaciones ruso-ucranianas.
En ese sentido, advirtió que las condiciones para dichos contactos ya serían diferentes, mientras recordó que las conversaciones entre Rusia y Ucrania se interrumpieron «tras un entendimiento de principio sobre los acuerdos de Estambul».
El proceso de negociación entre ambos países comenzó el 28 de febrero, cuatro días después del inicio de la operación militar rusa en Ucrania. En lo adelante tuvieron lugar varios encuentros, los primeros con sedes en Belarús, hasta el 29 de marzo, cuando tuvo lugar una ronda presencial en la ciudad turca de Estambul.
En ese encuentro se obtuvieron resultados para iniciar el camino hacia un acuerdo de paz, pero días después fue rechazado por la parte ucraniana.
Al respecto, el 12 de abril, el presidente ruso, Vladimir Putin, declaró que Kiev, al alejarse de los acuerdos alcanzados durante el diálogo en Turquía, llevó el proceso a un punto muerto.
El 20 de abril, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, informó que Moscú envió a Kiev un proyecto de acuerdo y que esperaría una respuesta, la cual no ha recibido hasta el momento.
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