«La seguridad de las urnas electrónicas e integridad del proceso electoral ya no pueden ser puestas en duda», afirmó Pacheco en una nota a la prensa tras Bolsonaro promover la víspera un encuentro con diplomáticos para repetir sospechas, sin pruebas y esclarecidas, sobre los dispositivos electrónicos y la organización electiva nacional.
Según el senador, «una democracia fuerte se hace con respecto al contradictorio y a la divergencia, independientemente del tema. Pero hay obviedades y cuestiones superadas, incluso asimiladas por la sociedad brasileña, que ya no admiten discusión», recalcó.
Insistió en que no hay argumento para criticar el sistema electoral, cuestionamiento que calificó de «malo para Brasil en todos los aspectos».
Pacheco resaltó que el Congreso Nacional «tiene obligación de afirmar a la población que las urnas electrónicas darán al país el resultado fiel de la voluntad del pueblo, sea cual sea».
Ante unos 40 diplomáticos, Bolsonaro volvió a atacar ayer el modo electoral del país y la posibilidad de fraude, sin razones, con la instalación de urnas electrónicas para el sufragio de octubre.
En la reunión en el Palacio de Alvorada (residencia oficial en Brasilia), el exmilitar afirmó que el procedimiento hacia la votación resulta «completamente vulnerable».
Rememoró la investigación abierta por la Policía Federal (PF) para determinar posibles invasiones de los sistemas del Tribunal Superior Electoral (TSE) en 2018.
«El hacker (pirata digital) dijo claramente que tenía acceso a todo dentro del TSE», señaló.
De acuerdo con la corte, prosiguió, «los hackers permanecieron durante ocho meses en las computadoras».
En su arenga, el excapitán del Ejército atacó nuevamente a ministros del TSE y del Supremo Tribunal Federal (STF), como Edson Fachin, Luís Roberto Barroso y Alexandre de Moraes.
Comentó que Fachin, en una decisión monocrática y luego validada por el juzgado superior, convirtió en candidato elegible al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien lo supera en todos los sondeos de opinión rumbo a la justa comicial.
El titular del TSE fue invitado al encuentro con los diplomáticos, pero declinó asistir, al alegar que no podía reunirse con un pretendiente electoral.
Actualmente, Bolsonaro enfrenta una investigación, en trámite en el STF, por divulgar informaciones referentes a una pesquisa policial secreta en 2021.
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