En un acto en la embajada del país caribeño en Moscú, personal del cuerpo diplomático, así como representantes de empresas cubanas en la nación euroasiática recordaron los sucesos del 26 de julio de 1953, cuando jóvenes cubanos se rebelaron contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959).
Asimismo, destacaron la importancia de esos hechos para el desarrollo del proceso revolucionario fraguado con el triunfo del 1 de enero de 1959 y el posterior avance del proceso Socialista que perdura en la actualidad. En declaraciones a Prensa Latina, el segundo secretario de la oficina política de la misión diplomática, Víctor Rodríguez, agradeció el apoyo recibido por su país desde la solidaridad rusa ante las agresiones de Washington y el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero, impuesto desde hace más de seis décadas.
Igualmente, denunció a quienes mienten, manipulan los hechos, propagan el odio e, incluso, piden una intervención extranjera en la mayor de las Antillas.
“Resistimos de modo creativo y construimos un país por todos y para el bien de todos. Seguiremos peleando con inteligencia y audacia. No renunciaremos a la defensa de la Revolución”, aseveró Rodríguez.
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