Organizador de los levantamientos carapintadas en 1987 y 1988 contra la presidencia de Raúl Alfonsín (1927-2009), Rico instó a las fuerzas castrenses a desconocer el Gobierno de Alberto Fernández y estar preparadas para actuar contra el mismo.
“Cuando la Patria está en peligro todo es lícito, menos dejarla desaparecer o perecer. Les pido que se pongan de pie, recuperen su autonomía intelectual y política, se unan, se organicen y establezcamos un adecuado enlace. Tenemos que estar al lado de nuestras Fuerzas Armadas y el Ejército”, señaló en un video difundido en redes sociales.
Esos pronunciamientos fueron repudiados de inmediato por organizaciones sindicales y sociales y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación presentó una denuncia en su contra por delitos contra el orden constitucional.
Mediante un comunicado, el PJ provincial calificó las declaraciones de Rico como una verdadera amenaza y exigió una investigación judicial al respecto.
«La democracia es un acuerdo de todos los argentinos que trasciende ideologías e identidades partidarias. Dijimos nunca más a la violencia política y a la dictadura cívico-militar», señala el texto.
Además, aboga por el respeto a la Carta Magna y a la estabilidad del país.
mem/gas