Durante un encuentro con el jefe del gobierno en funciones, Najib Miqati, el director de la entidad prestamista, Antoine Habib, informó que el único obstáculo para los prestatarios lo constituye la huelga de empleados estatales, al impedir completar la solicitud sin la documentación legal requerida.
El funcionario manifestó que a la espera de otorgar a los trabajadores del sector público sus derechos para regresar al trabajo, el Banco de la Vivienda espera reactivar el acuerdo de préstamo con el Fondo Árabe para el Desarrollo Económico y Social con sede en Kuwait.
Los préstamos otorgados por la institución bancaria adoptaron la moneda nacional y están dirigidos exclusivamente a los ciudadanos libaneses, aclaró Habib.
El directivo aseguró que mantener la libra libanesa aleja al prestatario del espectro de la subida del tipo de cambio frente al dólar estadounidense y su manipulación en el mercado negro.
Insistió que el Banco de la Vivienda no quiere lucrar con este servicio, sino contribuir al bienestar de los nacionales en tiempos de crisis con el objetivo de detener la migración de los pueblos a las ciudades y limitar la migración al extranjero.
Puntualizó que la financiación de estos préstamos procede del capital del banco y del préstamo del Fondo Árabe, que asciende a aproximadamente a 165 millones de dólares, según el acuerdo firmado por el estado libanés el 25 de abril de 2019.
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