No obstante, la organización reconoció que hubo avances importantes en las conversaciones realizadas sobre el tema de la banca pública, privada y las cooperativas, uno de los puntos de la agenda en desarrollo por ambas partes, tras el paro nacional efectuado en junio pasado por 18 días consecutivos.
«Seguiremos trabajando para que la banca privada cumpla con su parte para sacar de la crisis de crédito a miles de familias ecuatorianas», afirmó la Conaie en su cuenta en la red social Twitter.
En los tópicos de banca pública, BanEcuador se comprometió a condonar créditos por montos de un máximo de tres mil dólares, vencidos hasta el 31 de mayo último, en una decisión que incluye: intereses, intereses por mora y gastos legales.
Asimismo, la base de clientes será notificada a la Superintendencia de Bancos, por ende, no aparecerán en el buró de crédito y una vez perdonada la deuda, se eliminarán las medidas dictadas en los procesos de coactiva.
En esa misma línea, las partes establecieron la condonación de los créditos o activos de préstamos de capitales hasta 10 mil dólares, más sus intereses, así como otros costos y comisiones, considerados irrecuperables.
Por otra parte, quedó aprobada la reestructuración de créditos a los clientes con deudas vencidas de entre tres mil y 10 mil dólares, con un período de tres años de gracia total (capital e interés) o hasta 10 años plazo.
Los períodos de pago estarán adaptados a las condiciones productivas del cliente, mientras que el capital e interés de la operación comienza a pagarse a partir del mes 37 y los intereses vencidos a la fecha de reestructuración se liquidarán en los años octavo, noveno y décimo (los tres últimos).
Otro acuerdo está relacionado con la línea de crédito productivo para pequeños y medianos productores, a quienes BanEcuador destinará 100 millones de dólares, con fondos a entregar desde cinco mil hasta 20 mil dólares, al cinco por ciento de interés anual y hasta 10 años de plazo.
La mesa técnica realizada dispuso además reestructurar o refinanciar (por cliente) las operaciones de crédito de los segmentos de microcrédito, productivo para pequeñas y medianas empresas y el educativo otorgadas a personas naturales y organizaciones, cuyas obligaciones se encuentren vencidas desde el 1 de enero de 2020 hasta el 30 de junio de 2022.
Bajo ese mecanismo, habrá una calificación de riesgo al momento de su instrumentación y mientras se mantenga al día en sus pagos, la categoría será: normal.
También será posible considerar el otorgamiento de períodos de gracia, no cobrar gastos de cobranza, costos legales, tarifas, comisiones, y adicionalmente los beneficiarios podrán acceder a recursos adicionales, bajo el marco legal y la naturaleza jurídica de la entidad financiera acreedora.
Flexibilizar las condiciones para que las familias y las cooperativas renegocien las deudas, es otro de los avances alcanzados.
El seguimiento a esos consensos lo dará un equipo de veeduría, conformado por delegados de las organizaciones Conaie, el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) y la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), en representación del movimiento indígena.
A juicio de la Conaie, si bien hay logros con respecto al estado inicial de deudas y crisis asfixiante que desataron las protestas sociales, junto a otras medidas neoliberales, la gran banca lo único que acepta es reestructurar o refinanciar operaciones crediticias, lo cual, recalca el ente, no es suficiente.
En el tintero quedan al menos ocho puntos a tratar durante un lapso de tres meses que se extenderá hasta octubre venidero, mediado por la buena voluntad expresada por los sectores sociales y el Ejecutivo, con la finalidad de beneficiar a los grupos más golpeados económicamente en Ecuador.
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