“No he aceptado la renuncia del Premier Aníbal Torres, quien se compromete a seguir trabajando por nuestro país”, fue el escueto anuncio del mandatario, publicado en Twitter.
La noticia causó sorpresa, pese a que algunos comentaristas hicieron notar tras la reciente dimisión, hicieron notar que Torres solo puso a disposición su cargo y no presentó una renuncia irrevocable, lo que dejaba abierta la posibilidad de la ratificación finalmente concretada.
El ex primer ministro y parlamentario Guido Bellido, que había declarado como aliado del Gobierno que Torres debía continuar por su combatividad en la defensa del Ejecutivo, comentó hoy en un tuit simplemente “Ahora que lloren”, en alusión a quienes celebraban la supuesta salida del primer ministro.
La posición era compartida por otro congresista amigo del Ejecutivo, Guillermo Bermejo, quien tras la renuncia de hace dos días pidió la continuidad del premier.
“Que se quede Aníbal Torres, porque ha demostrado lealtad y compromiso con el proceso. Y porque es el dolor de cabeza de los golpistas y de la prensa de alquiler”, manifestó.
Desde la derecha extrema, el parlamentario José Cueto sostuvo que la dimisión frustrada solo fue supuestamente una cortina de humo para desplazar de la atención pública a las investigaciones de que es objeto por la Fiscalía de la Nación por presunta corrupción.
Otro legislador de similar tendencia, Alejandro Aguinaga, sostuvo que Castillo tuvo que ratificar a Torres porque no encuentra quien acepte participar en el Gobierno y, al igual que Cueto, acusó al ratificado de atacar constantemente a la oposición.
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