Siches declaró a la prensa que sobre la mesa están todas las opciones, pero serán implementadas de acuerdo con los resultados, aclaró respecto a las posibles respuestas a los problemas de seguridad planteados por la criminalidad y la migración en la zona.
«No descartamos ninguno de los instrumentos, pero siempre buscando resultados explícitos», dijo la también vicepresidenta de la nación suramericana.
Acerca de las conexiones entre migrantes y delincuencia explicó que el borrador de la nueva Constitución contempla y establece las herramientas legales para la expulsión del país de extranjeros relacionados con actividades delictivas.
Las autoridades chilenas reconocen el aumento de las operaciones de grupos delincuenciales en el norte del país, incluso la influencia y presencia de los llamados carteles dedicados al narcotráfico.
“Estamos de acuerdo que necesitamos desmantelar las bandas organizadas en el norte, mostrar la potencia del Estado, hacer medidas preventivas y en eso hemos estado trabajando”, comentó Siches.
El Estado de Excepción está vigente hoy en la llamada macrozona sur de Chile, en la región de La Araucanía, donde militares y efectivos del cuerpo de Carabineros están desplegados para poner coto a los enfrentamientos entre locales y compañías madereras.
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