El segundo jefe del Departamento Nacional de Extinción del Cuerpo de Bomberos de Cuba, Alexander Ávalo, confirmó que a pesar de los esfuerzos en este momento están bajo fuego los cuatro reservorios de combustible de la zona industrial afectada por el siniestro.
En conferencia de prensa explicó que en la actualidad se concentran en evitar la propagación del combustible provocada por la explosión de los tanques y enfriar la zona para crear condiciones que permitan aplicar la espuma que sofocaría las llamas.
Agregó que hay otra terminal cercana con productos claros como por ejemplo la gasolina, y se está evitando que llegue a esos objetivos.
Precisó que no existe peligro de que las llamas lleguen a la central termoeléctrica Antonio Guiteras, pero se adoptan medidas preventivas.
No es posible calcular cuando se podrá extinguir el incendio, pudieran ser días, no depende solo de nuestras acciones sino también del comportamiento del viento y las altas temperaturas, aseguró.
Ávalo subrayó que ha sido necesario cambiar constantemente de estrategia por la irregularidad en el comportamiento del siniestro, el cual no tiene precedentes en la historia de Cuba.
El oficial señaló que en un primer momento, el viernes pasado, se acometió el enfriamiento del rimer tanque que se incendió por el impacto de un rayoy cuando se hacían labores de extinción con espuma, se produjo su explosión.
A partir de ese momento ha ocurrido una reacción en cadena en la que se han producido otras explosiones hasta alcanzar los cuatro tanques, ante lo cual se aplican acciones defensivas para en cuanto las condiciones de temperatura lo permitan atacar las llamas con espumas y productos químicos.
Ávalo destacó que existen coordinaciones de trabajo con varias entidades como por ejemplo Instituto de Meteorología, la Empresa Cuba Petróleos, Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y otras instituciones.
Destacó el apoyo de los expertos de Venezuela y México, cuya experticia y equipamiento ha sido muy importante para enfrentar el siniestro.
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