Según divulgó el Servicio de Radiodifusión Pública del país (NPR), el 55 por ciento de los adultos afroamericanos y el 48 por ciento de los latinos dicen que actualmente enfrentan serios problemas financieros, mientras que para los adultos blancos la cifra fue del 38 por ciento.
La pesquisa, que incluyó a más de cuatro mil 100 adultos entre mediados de mayo y mediados de junio de este año, se realizó de conjunto por la Fundación Robert Wood Johnson, la Escuela de Salud Pública TH Chan de la Universidad de Harvard y el NPR.
En el caso de los desalojos, por ejemplo, la carga recae en gran medida sobre los inquilinos negros: el 16 por ciento dice que fue desahuciado o amenazado de serlo, mientras que el nueve por ciento de los arrendatarios blancos que fueron encuestados informaron experiencias similares.
A la inseguridad de la vivienda se suman los problemas financieros, pues más del 40 por ciento de los adultos afroamericanos y nativos americanos, y el 36 por ciento de los latinos, alegaron tener dificultades para hacer pagos de tarjetas de crédito o préstamos, abundó la fuente.
Acorde con el sondeo, tener suficiente dinero incluso para las necesidades básicas es un desafío para muchos hogares.
De hecho, apuntó el reporte, alrededor de un tercio de los adultos negros y latinos dicen que tienen serios problemas para comprar alimentos, en comparación con el 21 por ciento de los adultos blancos.
Esta situación es más apremiante para las poblaciones originarias ya que casi al 40 por ciento se le dificulta la obtención de comestibles.
Asimismo, más del 20 por ciento de los afroamericanos y nativos americanos dicen que pagar la atención médica o los medicamentos recetados es un problema grave para ellos.
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