Según el corresponsal de la Agencia Nacional de Noticias, el hombre armado de 42 años rechazó la oferta de entregarle la cantidad de 30 mil dólares y retiene aun a varios empleados del recinto.
El ministro del Interior del gobierno en funciones, Bassam Mawlawi, chequea desde la sala de operaciones las gestiones realizadas por la División de Información y las medidas adoptadas por las fuerzas de seguridad para proteger la seguridad de todos los ciudadanos.
Reportes locales informaron que el ciudadano ingresó a la institución con gasolina ante las falsas promesas del banco y en reclamo de su depósito para continuar con el tratamiento médico de su padre.
El jefe de la Asociación de Depositantes de Líbano, Hassan Mughniyeh, manifestó que la política de indiferencia adoptada con respecto a los derechos de los depositantes en los bancos arrastró al país a esta situación y responsabilizó a la autoridad política y las instituciones prestamistas de Líbano.
Al mismo tiempo, el jefe del Partido Kataeb libanés Sami Gemayel calificó de lamentable el suceso de Hamra, “que se repetirá cada vez más en la próxima etapa como muestra del irrespeto de los funcionarios hacia el pueblo libanés”, expresó.
Inflación del 890 por ciento, salario mínimo mensual menor a 25 dólares, devaluación de la moneda, altos precios en los artículos de primera necesidad y 2,2 millones de personas necesitadas de alimentos evidencian el agravamiento de las condiciones de vida en Líbano, según Naciones Unidas.
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