Luego de varias semanas intensas, con temperaturas siempre por encima de los 35 grados centígrados y hasta 45, los termómetros, al parecer, darán cierta tregua al país ibérico con algunas lluvias, aunque la situación se mantendrá complicada este jueves.
La Agencia Estatal de Meteorolgía (Aemet) lanzó alertas por calor en 11 comunidades, tres de color naranja (riesgo importante), y por tormentas en Asturias, con registros que pueden alcanzar los 40 grados en la parte sur de la nación.
Las provincias de Jaén, Zaragoza y Vizcaya permanecen en alerta naranja, con incidencia directa en la sierra de Cazorla y en el valle del Segura, así como en la ribera zaragozana del Ebro.
Según Aemet, las máximas oscilarán entre 38 y 40 grados Celsio en varias zonas de Andalucía,en particular en las provincias de Córdoba, Granada y en el valle del Guadalquivir en Jaén.
En el resto de España, la situación tampoco será favorable, ni siquiera en la parte norte donde habitualmente el clima es más fresco.
«La persistencia del calor este verano es extraordinaria, y parece que va a continuar», reiteró la Aemet.
Sin embargo, anticipó que «habrá ligeros descensos térmicos», para los próximos 15 días, si bien «se prevén temperaturas inusualmente altas en amplias zonas de la Península y Baleares».
En paralelo, los incendios forestales han arrasado con más de 200 mil hectáreas en lo que va de año, en su inmensa mayoría como consecuencia del intenso calor, al cual se la añade una sequía que hizo descender las reservas en los embalses del país.
La sequía y los incendios impactaron duramente en la producción agrícola, entre otros rubros el de la aceituna, base del prestigioso aceite de oliva español que ve en riesgo mantener los niveles de fabricación del preciado óleo, fundamental en la famosa dieta mediterránea.
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