Al Saadi fue trasladado este jueves ante la corte militar de la prisión de Ofer, donde su abogado denunció las agresiones y golpizas a que fue sometido y reclamó su inmediata liberación, reportó la agencia de noticias Al Quds.
El dirigente palestino fue arrestado a principios de este mes en su vivienda ubicada en la ciudad de Jenin, en el norte de la Ribera Occidental, lo cual elevó la crispación entre la Yihad Islámica e Israel, que decidió atacar al grupo en su bastión en la franja de Gaza.
Durante las 66 horas de bombardeos al menos 47 palestinos murieron y más de 360 resultaron heridos.
Negociada por Egipto, la tregua entre las partes entró en vigor el domingo en la noche, pero hay discrepancias sobre la misma.
La milicia palestina afirma que como parte de lo acordado, Israel debe liberar al Saadi y a Khalil Awawdeh, en huelga de hambre en una cárcel de la vecina nación.
Tel Aviv rechaza esa interpretación al señalar que solo El Cairo se comprometió a la excarcelación de ambos reclusos.
“Israel no estuvo de acuerdo con nada, respondimos negativamente a las demandas”, afirmó el ministro de Seguridad Interna, Omer Barlev, horas después de la entrada en vigor de la tregua.
Hay un compromiso egipcio en este sentido y no un compromiso israelí, coincidió el titular de Justicia, Gideon Sa’ar.
La máxima figura del grupo armado, Ziyad al-Nakhalah, amenazó con reanudar la lucha si no se cumple esa condición.
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