El mandatario mencionó en una reunión del Gabinete que la subida de los precios, sobre todo de la energía y los alimentos, tiene un gran impacto en las empresas y los consumidores, reseñó la agencia Kyodo.
“El pan y los fideos, que están hechos de trigo, son artículos esenciales en nuestra vida diaria. Es fundamental que sus precios sean estables”, recalcó.
Asimismo, Kishida precisó que apoyaría cada región según sus necesidades reales y en los renglones económicos más sensibles.
Como parte de las medidas paliativas hasta la fecha, el gobierno priorizó los subsidios a los mayoristas petroleros para frenar el encarecimiento de la gasolina, a hogares de bajos ingresos y a los agricultores afectados por el aumento del costo de los fertilizantes.
Una encuesta reciente de la empresa de investigación crediticia Teikoku Databank reveló que más de 10 mil productos alimenticios continuarán la escalada de precios durante la segunda mitad de 2022 debido, principalmente, a los inflados valores de importación originados por la debilidad del yen.
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