“Este lunes, los últimos militares de Barkhane presentes en suelo maliense cruzaron la frontera entre Mali y Níger. Ellos estaban localizados en la plataforma operacional de Gao, transferida a las fuerzas armadas locales”, señaló en un comunicado.
En febrero el presidente Emmanuel Macron había confirmado el fin de nueve años de despliegue francés en el país africano, ante las crecientes tensiones con la junta militar, que expulsó al embajador de París y acusó a la potencia europea de injerencia en sus asuntos internos.
Por su parte, Macron criticó a Bamako, alegando que no tenía interés en enfrentar al terrorismo y sí en garantizar sus prioridades económicas.
“Atrás quedó el tiempo en que, en 2013, fueron recibidos como libertadores. Su incapacidad para restaurar la seguridad, a pesar de los éxitos operativos, ha molestado a la población, ya que más de 10 mil 200 malienses han muerto por la violencia desde 2015”, publicó entonces en un editorial el diario Le Monde.
En Mali murieron alrededor de 50 efectivos de Barkhane, misión de cerca de dos mil 500 uniformados que estarían relocalizados en la tensa región del Sahel.
Ante las críticas, Macron negó hace unos meses que se trate de un fracaso, al alegar: “Qué hubiese pasado sin nuestra intervención”.
Según el Ministerio de Defensa, la salida de las tropas francesas de territorio maliense representó un desafío logístico, que se materializó con orden y seguridad.
rgh/wmr
