Henry calificó los hechos de crimen odioso y reiteró su firme determinación de combatir sin descanso la inseguridad, de acuerdo con un mensaje publicado en la red social Twitter.
El jefe de Gobierno aseguró que dio orden a la Policía para cercar a los bandidos y poner fin al reino de terror.
La víspera individuos armados abrieron fuego contra un vehículo en un intento de secuestro, según narró la prensa local.
La abogada Sherwood Sondjie fue acribillada a balazos y quemada junto con su hermana y su madre en el puente de Tabarre. Otras cinco personas, entre ellos tres motociclistas, murieron como consecuencia del tiroteo.
La Facultad de Derecho y Economía anunció que cerrará sus puertas mañana lunes en protesta contra el “atroz asesinato” y reclamó justicia a las autoridades.
Las cifras de asesinatos y secuestros crecieron en la nación caribeña, sumida actualmente en una ola de violencia por la acción de las pandillas armadas que controlan más de un 30 por ciento de Puerto Príncipe, según organizaciones de derechos humanos.
De abril a la fecha, al menos 500 personas murieron como resultado de los enfrentamientos de las pandillas, y otros cientos sufrieron heridas, de acuerdo con balances oficiales y de Naciones Unidas.
A inicios de agosto el exsenador Yvon Buissereth fue asesinado y luego quemado en su vehículo en Laboule 12, un barrio acomodado de la capital, supuestamente por la banda Ti Makak.
El primer ministro prometió entonces que cazaría a los grupos criminales hasta las últimas consecuencias para que respondan por sus “despreciables” actos ante la ley.
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