Hasta el próximo día 1 se prolongará el encuentro, iniciado con una presentación de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de la UO, a partir de sus procesos, organización y expectativas, a lo cual seguirán visitas a hospitales santiagueros con miradas sobre la práctica asistencial.
En la jornada inicial, con la presencia de Hans De Loof, al frente de la delegación de la institución belga, fueron ofrecidos pormenores acerca del estado del proyecto VLIR-UO, el convenio que echó a andar en 2014 entre la entidad cubana y el Consejo Universitario Flamenco, de Bélgica.
Considerada la iniciativa de colaboración más importante en los casi 75 años de la UO, el nexo interuniversitario ha repercutido en las áreas de imágenes biomédicas y procesamiento de señales, producciones biofarmacéuticas de origen natural, biocombustibles, energía renovable y tecnologías limpias.
Otros ejes han estado en el fortalecimiento de la informatización y las comunicaciones en la institución cubana, en las ciencias básicas y naturales y las habilidades en lenguas extranjeras, así como en la formación de postgrado y la publicación de artículos en revistas de alto impacto.
El Hospital Clínico Quirúrgico Juan Bruno Zayas, la Empresa Forestal Gran Piedra Baconao y las Salinas de la provincia de Guantánamo figuran entre los centros vinculados a los beneficios con los resultados de este programa de cooperación que trascendió lo académico para mejorar la realidad.
La segunda universidad fundada en Cuba se prepara para celebrar sus 75 años, el próximo 10 de octubre, y entre sus logros recientes está la inclusión entre las mil entidades sobresalientes de la educación superior en el mundo, de acuerdo con el ranking a ese nivel.
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