Imágenes divulgadas por la organización ambientalista en las redes sociales muestran a cinco personas alrededor de la silla del presidente de ese órgano legislativo, mientras enarbolan telas con las leyendas: “Dejen que la gente decida” y “Asamblea ciudadana ahora”.
Según trascendió, los manifestantes aprovecharon una visita guiada al Palacio de Westminster para entrar a la Cámara Baja, donde las tres mujeres que formaban parte del grupo se adhirieron con pegamento al emblemático butacón de color verde.
Estamos en crisis, y lo que sucede a diario en esta cámara nos pone a todos en ridículo. No podemos darnos el lujo de seguir así, afirmó uno de los activistas en un mensaje leído dentro del recinto parlamentario.
Consideró, además, que el sistema político británico está demasiado obsoleto y alejado de la realidad, como para ver más allá del próximo ciclo electoral, y hacer lo que hace falta.
Varios miembros de Extinction Rebellion se encadenaron a las rejas que rodean el edificio, y otro escaló el andamio que cubre parte de la torre del emblemático Big Ben para desplegar una gran pancarta, en la cual se exigía convocar de inmediato a una asamblea ciudadana.
La Policía Metropolitana informó a través de Twitter que estaba al tanto de la protesta en el Palacio de Westminster, y que sus agentes y el personal parlamentario lidiaban con la situación.
Según la organización ecologista, la acción de este viernes marcó el inicio de la primera fase de las manifestaciones pacíficas que comenzarán a partir del 10 de septiembre en Londres y otras ciudades británicas, y se extenderán hasta la primavera de 2023.
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