Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general António Guterres, dijo en conferencia de prensa que los nuevos presupuestos del Fondo de la Organización de Naciones Unidas (ONU) impulsarán la capacidad de tratar e identificar la desnutrición aguda.
Según estimaciones, unos 1,74 millones de niños menores de cinco años podrían sufrir desnutrición aguda en la región este año.
Mientras, más de 300 mil infantes tendrían una grave insuficiencia de calorías y nutrientes principales.
Nuestros colegas humanitarios subrayan que si no se toman medidas inmediatas, puede que más de cinco mil niños mueran y los que sobrevivan quizás presenten discapacidades de por vida, precisó Dujarric.
De acuerdo con alertas de agencias de la ONU, una crisis generalizada alimentaria está próxima en el mundo.
El estudio “Puntos críticos del hambre: alerta temprana de inseguridad alimentaria aguda” señala que los conflictos, las condiciones climáticas extremas, los problemas económicos, la deuda pública excesiva y los efectos de la pandemia de Covid-19 empujan a millones de personas en todo el planeta a la pobreza y el hambre.
La desnutrición hace que los niños corran un mayor riesgo de morir por infecciones comunes, agregó el portavoz del secretario general.
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