Maamau denunció los ensayos nucleares realizados en Isla Navidad, que dañaron el ecosistema local e invitó a la ONU a servirse de dicha ínsula como centro global para la investigación antinuclear y programas y actividades afines.
Explicó que las consecuencias de la pandemia por el Coronavirus SARS-CoV-2, el cambio climático y el conflicto en Ucrania, son ejemplos claros de desafíos interconectados que deben ser abordados con urgencia en este período de sesiones de la Asamblea de Naciones Unidas.
Una humanidad rota no puede arreglarse con maravillosos discursos, reuniones, resoluciones e instrumentos internacionales, sino con solo un despliegue de mayor comprensión y solidaridad, señaló.
El mandatario aprovechó la ocasión para agradecer el apoyo internacional al pueblo de Kiribati durante la pandemia.
Kiribati es una república insular del Pacífico Central que incluye 33 atolones de coral e islas que se distribuyen por tres millones y medio de kilómetros cuadrados de océano, con islas en los hemisferios oriental y occidental y al norte y sur del Ecuador.
Uno de los principales desafíos de esa nación insular es el cambio climático, pues según expertos, podría convertirse en el primer país en desaparecer bajo las aguas del ccéano, con el aumento del nivel del mar.
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