Según la empresa estatal Cnooc, la instalación se ubicó frente a las costas de la sureña provincia de Guangdong, pesa 40 mil toneladas y debe producir en un inicio dos mil 700 toneladas de carburantes al día.
Se espera que paulatinamente extraiga cinco mil toneladas de hidrocarburos diariamente.
Los desarrolladores del Haiji-1 aseguran que las tecnologías incorporadas a la plataforma ofrecen ventajas como mayor eficiencia, bajo costo en las labores petrolíferas y un alto nivel de localización de yacimientos.
En los últimos años China descubrió y puso en explotación vastas reservas de petróleo y gas natural tanto en tierra como en altamar, lo cual le ayuda a reforzar la seguridad energética nacional y la economía de las regiones circundantes.
El campo de Tarim -ubicado en la región autónoma uigur de Xinjiang- es el más grande y a la vez uno de los más difíciles de explorar por un agreste entorno terrestre y las complicadas condiciones subterráneas.
Sus operaciones representan una sexta parte de la producción total de gas del país y el combustible extraído benefició anualmente a 400 millones de personas en más de 120 ciudades, así como a más de tres mil empresas.
Las perspectivas para los próximos años son positivas, pues se espera aumentar a la producción a 36 millones de toneladas de los hidrocarburos en 2025.
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