Al-Bakhiti aseguró que los países agresores impiden que los barcos entren a puertos yemenitas por la fuerza de las armas, y advirtió que de prolongarse esa situación, responderán.
Respecto a la tregua de la ONU, alertó que Yemen no acepta un alto al fuego permanente o prolongado si continúa la agresión.
Por su parte, el miembro del Consejo Político Supremo de Yemen, Mohammad Ali Al-Houthi, se manifestó en contra de un pronunciamiento del Consejo de Seguridad de la ONU que calificó de «extremistas» las exigencias de Saná para prolongar la tregua en Yemen.
«No es extremismo levantar el asedio a Yemen. No es extremismo entregar los salarios de los empleados provenientes de los ingresos del petróleo. No es extremismo levantar la prohibición de viajar al aeropuerto de Saná desde todos los destinos. Lo que sí es extremismo es la declaración del Consejo de Seguridad», subrayó el político yemení.
Mientras, el viceministro de Asuntos Exteriores del gobierno, Hussein Al-Azzi, señaló que, al contrario de lo que dice el enviado estadounidense Tim Lenderking, las condiciones en el país no son difíciles ni imposibles.
El alto al fuego en esta nación se rompió el pasado domingo, tras seis meses de tregua, luego que fracasaran las negociaciones con la intervención del enviado especial de la ONU. Tanto el Gobierno como los rebeldes hutíes se acusaron mutuamente por el fracaso, mientras crece el temor por la reanudación de los combates.
lam/ycv