«Pedimos el arresto del director general de la PRF y los superintendentes regionales que no están cumpliendo con la decisión del TSE (Tribunal Superior Electoral)», principalmente en el nordeste, demandó en la red social Twitter la congresista Gleisi Hoffmann, timonel de la organización política.
Insistió en pedir a «los parlamentarios de nuestra coalición (Brasil de la Esperanza) que se dirijan a los locales de las operaciones en sus estados y den orden de arresto a los policías, inclusive PMs (militares) como en RJ (Río de Janeiro)».
Ante los hechos, el presidente del TSE, Alexandre de Moraes, prohibió a la policía que divulgue las operaciones que realice por trasgresiones en la segunda vuelta de sufragio.
En un comunicado, el ministro vedó que esa corporación del orden «divulgue, hasta el fin de la segunda vuelta (17:00, hora local), el resultado de las operaciones relacionadas a las elecciones».
De Moraes atendió de esta manera una demanda del diputado Paulo Teixera, del PT, quien acusa al Gobierno y al Ministerio de Justicia de usar el cuerpo policial para beneficiar la candidatura de reelección del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, en detrimento de la del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Medios periodísticos aseguran que la PRF incumplió la orden de la Justicia Electoral y realizó este domingo, día del plebiscito, al menos 560 operaciones de vigilancia contra vehículos que hacen el transporte público de electores.
El número de manifestaciones consta en control interno de la PRF. La noticia fue publicada inicialmente por el periódico Folha de Sao Paulo y la confirmó TV Globo.
Lula, abanderado del PT, y Bolsonaro, del Partido Liberal, disputan este domingo la segunda ronda de referendo después que ambos no lograron en el primer pleito del 2 de octubre la mayoría absoluta de votos, es decir, más de la mitad de válidos (excluidos blancos y nulos), como establece la legislación nacional para ser electo.
Más de 156 millones de brasileños en todo el país y en el exterior están aptos para elegir al nuevo mandatario del país. En 12 estados, los electores tendrán que designar también un gobernador.
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