Hoy, las pasiones son tan intensas que de modo virtual se da a España en la final del 18 de diciembre en Qatar. Pudiera ser, porque en el deporte de las multitudes casi todo es posible, pero objetivamente se antoja una meta quimérica.
Mientras tanto, la venta de humo está de moda. Analistas del popular programa El partidazo de COPE, de la cadena radial, con tramos televisivos, consideraron que Brasil enseñó poco y que Francia y Portugal son equipos aburridos.
Todo el virtuosismo y defensa a ultranza para los españoles y su excéntrico entrenador, Luis Enrique Martínez, junto con la calidad de los jugadores que nublan el juicio equilibrado entre el verdadero potencial hacia el futuro, con sus jóvenes talentos y la realidad.
Ya se vio claramente que el aplastante triunfo sobre los ticos fue un espejismo. Ni la Roja es tan buena, ni los rivales tan malos. Y el mejor test, Alemania, dejó buenas sensaciones, aunque insuficientes para doblegar a los teutones
Para ensalzar más la goleada de España sobre los costarricenses, muchos llegaron a decir de que no saben si el nivel de los centroamericanos es igual o menor que el de los serbios.
En cualquier caso, la segunda prueba de realidad llegará este jueves en su enfrentamiento con Japón, otro equipo de cierto rango que, al menos, dará una medida de la proyección de los españoles de Pedri, Busquets, Olmo, Torres, Asensio, Gavi y Simón.
La vehemencia española tampoco es excepcional. Hinchas y medios argentinos y brasileños transitan por el mismo camino, seguidos de cerca por franceses, ingleses y portugueses, pero estos tres últimos más moderados.
Los momentos de la verdad se acercan en la cita en tierras árabes y por lo visto hasta el momento, Brasil y Francia se antojan las selecciones más sólidas, digan lo que digan los españoles.
No obstante, Argentina sigue siendo candidato al título, Portugal e Inglaterra se acercan al primer plano, mientras España, Croacia y quién sabe si Alemania, tampoco están descartados.
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