En sus primeras presentaciones, la escuadra azteca igualó 0-0 frente a Polonia y cedió 0-2 versus Argentina en un choque pletórico de morbo después del pitazo final, con los sonados mensajes del boxeador Saúl “Canelo” Álvarez y su amenaza virtual a Lionel Messi.
Más de 180 minutos sin mojar la pólvora preocupan seriamente al “Tata” Martino, que prepara ahora el choque contra Arabia Saudita colmado de buena vibra, pues todavía el “Tri” posee opciones de avanzar a la ronda siguiente.
Debemos hacer que la construcción de juego sea proporcional a las opciones claras a la ofensiva, dijo el entrenador en la conferencia previa al desafío de mañana en el Estadio Lusail, sede, además, de la disputa del título de la competición, el venidero 20 de diciembre.
No se trata solo del trabajo de los delanteros. Necesitamos una labor coral. El equipo debe desdoblarse más y mejor a través de los volantes y los laterales, comentó al dar luces sobre por “dónde le entra el agua al coco” o la redonda en la portería.
El contexto causó un ambiente poco favorable en la hinchada norteamericana, que siente una gran decepción después de un viaje extremadamente largo y varias ediciones en fases de eliminación directa.
En tal sentido, el mediocampista Andrés Guardado lamentó la situación y dejó claro que nunca faltaron los deseos de ganar. “Somos profesionales, hemos luchado para vivir este tipo de momentos y bajo esta presión”, manifestó.
Guardado vive su quinta participación mundialista, por ello tiró de su experiencia a la hora de dirigirse a los fanáticos. “Sepan que vamos a pelear, nos encantaría que estuvieran junto a nosotros”, dijo.
Actualmente, el grupo C es uno de los más abiertos, pero México no depende de sí mismo. Necesita ganar y esperar el resultado del encuentro entre la Argentina de Messi y la Polonia de Robert Lewandowski.
Europeos, sudamericanos y asiáticos tienen posibilidades de pasar si igualan, algo que no es del todo recomendable por las múltiples variantes que pueden darse. Visto lo visto, la mejor opción es salir victorioso y no dejar margen al concurrente azar.
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