El nuevo ejecutivo será diferente a los anteriores porque tiene elementos conocidos por su extremismo y radicalismo, afirmó durante una reunión aquí con embajadores acreditados ante el Estado de Palestina, reportó la agencia oficia de noticias egipcia MENA.
Al Maliki se refirió así a varias figuras que integrarán la nueva administración israelí como el diputado Itamar Ben Gvir, conocido por su discurso racista y antiárabe.
El ministro de Relaciones Exteriores y Expatriados aseguró que en Israel no existe un verdadero socio para negociar la paz.
El funcionario reclamó a la comunidad internacional sanciones para las autoridades de Tel Aviv al señalar que es necesario enviar un mensaje a ese país por su negativa a dialogar y por sus crímenes cometidos en los territorios ocupados.
Al respecto, denunció las sistemáticas violaciones ejecutadas por las fuerzas de seguridad y los colonos en esas zonas.
El jefe de la diplomacia palestina enfatizó la necesidad de traducir el compromiso con la solución de dos estados en mecanismos de acción.
La política del silencio otorga a Israel la oportunidad de cambiar la realidad sobre el terreno para evitar el establecimiento de un Estado palestino, subrayó.
Sobre el tema, advirtió que más de 740 mil colonos israelíes viven en unos 170 asentamientos ilegales ubicados en Cisjordania y Jerusalén Este.
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