Esa medida ayudaría a preservar productos de tanta valía como el cristal de Bohemia o la porcelana de Limoges, por ejemplo.
El ministro checo de Industria y Comercio, Josef Síkela, señaló que este reglamento garantizará la calidad y autenticidad de los productos vendidos en la Unión Europea (UE).
Las indicaciones geográficas establecen derechos de propiedad intelectual para productos específicos cuyas cualidades están esencialmente ligadas a la zona de producción, pero actualmente solo afectan a vinos, bebidas espirituosas, productos alimenticios y agrícolas.
La nueva norma garantizará que nadie se beneficie gratuitamente del trabajo de alta calidad de los genuinos productores de una amplia gama de artículos artesanales e industriales de la UE, dijo Síkela.
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