De acuerdo con reportes locales, los sindicalistas detuvieron sus labores este viernes en protesta por la discrecionalidad en los ascensos y para reclamar la implementación del contrato colectivo de trabajo.
Las tiendas dejaron de recibir clientes en las sedes oficiales de Alpha y Touch y cerraron los servicios de atención a la población; así como todas las labores técnicas y logísticas.
El Sindicato de Empleados y Usuarios de Operadores Celulares reiteró la solidaridad con la huelga y señaló que el movimiento no se detendrá hasta que cada trabajador obtenga sus derechos.
A fines de agosto pasado, los empleados de Alfa y Touch reclamaron corregir el desequilibrio en el valor de los salarios después de negociaciones y consultas con las direcciones de las dos empresas sin llegar a un resultado positivo.
En esa ocasión, los trabajadores cerraron todas las sucursales y puntos de venta en los principales centros de las compañías de celulares y en las regiones, además de paralizar el proceso de recarga de tarjetas y atención al cliente.
Sin presidente de la República y en medio de discrepancias políticas, el sector público libanés amenaza con retomar la huelga como sucedió durante los meses de junio, julio y agosto debido al incumplimiento a sus demandas para tensar la situación económica y social.
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