Los hemos invitado a que se unan, pero que también se alíen con otros sectores del pueblo colombiano detrás de este propósito, manifestó en declaraciones trasmitidas por Venezolana de Televisión, Pablo Beltrán, jefe del equipo de la guerrilla del ELN.
El mensaje fue enviado a los participantes de la Convención Nacional Campesina que se está celebrando en Bogotá, en los predios de la Universidad Nacional, con más de dos mil participantes de todos los sectores.
Los campesinos colombianos, señaló Beltrán, son los más excluidos, empobrecidos, los más despojados, los que les toca ver la depredación de su territorio y son los que más sufren el conflicto.
Apuntó que los invitaron para hacerlos partícipes de la mesa y, a su vez, se sumen con otros sectores porque el “objetivo grande frente a Colombia es tener una nación en paz y equidad», acotó.
El líder guerrillero aseguró que eso no se logra con el esfuerzo de un solo sector, sino que tiene que ser a través de una alianza muy amplia.
Por su parte, el jefe de la delegación del Gobierno de Gustavo Petro a los acuerdos de paz, Otty Patiño, anunció que aún el tema de la reforma agraria no se abordó pero estamos frente a esta Convención Nacional, a la cual le deseó el mayor de los éxitos.
Estamos en toda la disposición de escucharlos, de conocer sus conclusiones y en la medida que podamos como mesa de negociación, como Gobierno y organización que quiere ayudar a construir la paz, pues también que la construyamos con ellos, comentó.
El exguerrillero colombiano aseveró que el diálogo no puede ser solo una negociación entre Gobierno y la guerrilla, sino que tiene que participar la población civil, especialmente la más objetada por el conflicto armado.
Sabemos que la violencia que ha padecido Colombia ha afectado fundamentalmente a los sectores rurales, a los campesinos, y muy especialmente a las mujeres campesinas, subrayó.
Patiño expresó que la paz nacional pensada solo desde las cumbres, no será posible desarrollarla, sin tener en cuenta las realidades territoriales, donde son las familias, y dentro de ellas, las mujeres y los niños, los que más sufren los efectos de la contienda armada.
Manifestó que frente a la urgencia y las tragedias humanitarias que viven muchas comunidades campesinas, el dolor, la muerte, el miedo, la zozobra, no tienen aplazamientos y no puede esperar la lentitud burocrática con que a veces los gobiernos actúan.
Esas demandas tienen que ser atendidas e ir a la velocidad de esas urgencias, recalcó, y reveló que esos son los temas sustanciales en que coincidieron con la delegación del ELN, en estas primeras semanas de reuniones.
rgh/jcd
